Cuando hablamos de la distribución de los empleados en los espacios de trabajo, nos referimos específicamente a la ubicación física que cada uno de nuestros colaboradores va a ocupar en la oficina. Podemos caer en el error de pensar que este es un tema aparentemente estético y relacionado a diseño; acompáñenos mientras descubrimos por qué esto juega un rol importante en el desempeño de su organización u oficina.
Para conseguir que su empresa se desarrolle adecuadamente es necesario contar con algo más que un sistema de prácticas de trabajo establecidas: es importante integrar las herramientas y el espacio de trabajo con los que el colaborador se relaciona cotidianamente.
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La importancia de la adecuada distribución de los empleados en los espacios de trabajo se debe a que esta puede ayudar a la empresa a aumentar la eficiencia en los procesos, proporcionando a los empleados un espacio acorde a sus cualidades y tareas.
Es importante recordar que no hay una fórmula para todos; cada empresa cuenta con objetivos y necesidades diferentes. Algunos de los criterios que una empresa debe considerar para adecuar correctamente a su personal son los siguientes:
La evolución de las oficinas ha marcado un rumbo diferente en cuanto a la distribución de los empleados. Actualmente los espacios colaborativos están generando más interés y cobrando más importancia.
En cada oficina, es importante tomar en cuenta las habilidades y características que tiene cada grupo de trabajadores y como el espacio les es útil para optimizar sus tareas.
Distribución según la cultura organizacional de la empresa.
En uno de nuestros artículos Cultura organizacional en una empresa: pilar fundamental para el éxito, exploramos los 4 tipos de cultura; identificar su cultura facilitará la toma de decisiones en cuanto a la distribución de oficinas y áreas dentro de la organización.
Esta cultura se centra en el desarrollo interno en un largo plazo, confía fielmente en los equipos de trabajo, la participación y el consenso para la realización del trabajo, apoya un entorno laboral flexible. Se preocupa por las personas y su relación con el espacio. Las áreas de trabajo deben incluir espacios informales, puntos de encuentro flexibles y un diseño orgánico.
Este tipo de cultura se concentra en realizar las cosas primero, diferenciándose de las demás por tener un alto grado de experimentación e individualidad. Los espacios preferidos son áreas en que promueven la libertad de desarrollar ideas creativas; un diseño orgánico con un entorno altamente flexible.
El enfoque de esta cultura es realizar los procedimientos al pie de la letra, siguiendo pasos plenamente establecidos por las altos mandos de la organización. Las personas que se identifican con esta cultura prefieren tener un espacio individual y salas más formales. Un área estructurada y simétrica.
Sin embargo, en ocasiones los equipos de trabajo buscan espacios alternativos en donde las conexiones sociales les son de mucha ayuda para idear o ejecutar un plan; por lo cual también es importante tener espacios de descanso/sociales.
La prioridad para este tipo de cultura son los resultados; se concentran en hacer las cosas muy rápido con el objetivo de ganar. Buscan la manera de tener espacios semi formales y con áreas un poco más colaborativas.
Los espacios para este tipo de cultura deben estar adaptados para el desarrollo de tareas tanto individuales como colectivas, áreas en donde la presentación de ideas y soluciones se trabaje de una forma informal, sin caer en la imprudencia.
Cuando se tiene una distribución adecuada de los empleados y los espacios de trabajo, los procesos fluyen de manera más fácil. Algunos de los beneficios son:
Es indispensable que cada empresa realice un análisis de tres factores: sus colaboradores, sus objetivos empresariales y su espacio físico. Esto le permitirá crear soluciones basadas en la premisa de un espacio de trabajo orgánico e identificar si el tipo de distribución que está empleando es el acorde a cada tipo de trabajo o si se hace necesario una reestructuración de la distribución de los espacios de trabajo.