Ofrecer el mejor mobiliario posible al recurso más importante (las personas) no solo garantiza una buena disposición de trabajo, también aumenta el rendimiento, la motivación, la proactividad, la iniciativa creando un ambiente de trabajo agradable. Por esta razón es importante entender los beneficios de contar con sillas ergonómicas.
1. Ajuste del respaldo: El mecanismo lateral o inferior que tienen las sillas ergonómicas, permiten dar un ajuste óptimo y personalizado al respaldo, de manera que cada usuario pueda colocar la altura y ángulo más cómodo para su espalda. Conseguir el máximo soporte en la zona lumbar es vital.
2. Facilidad de movimiento: A diferencia de las sillas convencionales, una silla ergonómica ofrece mejor desplazamiento y postura, algunas también permiten mover los apoyabrazos, respaldo de la cabeza y soporte de pies.
3. Altura del asiento: El asiento de una silla ergonómica puede regularse en altura, de forma que los pies estén siempre en contacto firme y apoyados sobre el suelo, para no sobrecargar las piernas.
4. Brazos ajustables: El dejar las manos en el aire permite que la circulación sanguínea fluya mejor, evitando calambres, molestias y cansancio muscular en manos, antebrazos y hombros.
5. Materiales: La calidad de una silla ergonómica ofrece mayor resistencia al desgaste por el roce y la humedad creada por la transpiración.
6. Tipo de actividad: Las sillas ergonómicas ofrecen soluciones y alternativas para todo tipo de actividad, desde redactores, contadores y asistentes, hasta ejecutivos y gerentes que necesitan contar con sillas altamente cómodas y que ayuden a mejorar las labores y el desempeño.
7. Inversión a largo plazo: La calidad que ofrecen las sillas ergonómicas, se traduce en mayor durabilidad